Este 28 de septiembre, Día Internacional de Aborto Seguro, destacamos los esfuerzos colectivos de nuestra comunidad diversa, intergeneracional y transfronteriza para promover el derecho al acceso al aborto seguro y a la justicia reproductiva. Mientras enfrentamos amenazas persistentes y emergentes al derecho al aborto y la justicia reproductiva, nos unimos en #SolidaridadAbortera para defender y promover estas libertades fundamentales.
Unetenos para movilizar por la justicia reproductiva y garantizar que todas las personas tengan el apoyo, la información, los servicios y los recursos que necesitan para tomar decisiones autónomas sobre sus propios cuerpos y vidas.
Este 28 de septiembre -Día Internacional del Aborto Seguro- rendimos homenaje a los esfuerzos colectivos de todas aquellas personas que hacen que los abortos sean seguros y accesibles. Si bien abortar es una decisión individual, a menudo se pasa por alto que el aborto seguro es posible gracias a los esfuerzos colectivos de una comunidad que apoya. Esto incluye proveedores de atención médica que ofrecen atención compasiva y calificada, activistas que abogan incansablemente por los derechos reproductivos, defensores legales que trabajan en litigios políticos y estratégicos, redes de apoyo, familiares y amistades que brindan apoyo emocional y logístico. Estos esfuerzos colectivos garantizan que los abortos sean tanto un derecho legal como una realidad segura, accesible y libre de estigmas para todas las personas que necesitan servicios de aborto, independientemente de sus circunstancias.
El derecho al aborto está siendo atacado y su defensa requiere acciones consolidadas urgentes basadas en solidaridad y apoyo mutuo. En muchas partes del mundo continúa la criminalización de quienes buscan y practican abortos seguros. Algunos gobiernos amenazan con hacer retroceder el acceso a servicios de aborto seguro, promueven sentimientos anti-derechos y adoptan recortes en el presupuesto de salud pública, reduciendo aún más el acceso. Por ejemplo, en Indonesia, donde el aborto ya está penalizado, se aprobó una nueva ley que otorga a la policía la autoridad exclusiva para conceder derecho a abortar a las víctimas de violación, lo que aumenta las barreras para sobrevivientes.
Además, los grupos anti-derechos han construido redes transnacionales bien coordinadas y financiadas, con tácticas en evolución y alcance global. En respuesta, necesitamos estrategias innovadoras y solidaridad global entre nuestros movimientos.
Cuando miramos hacia atrás en la historia, vemos que hemos sobrevivido y prosperado, a pesar de los ataques y las amenazas, y la movilización y organización incansables en todas las regiones del mundo nos han convertido en una marea imparable. En medio de desafíos, nuestro movimiento continúa prosperando, logrando victorias desde México a Francia y Armenia.
Entre estos logros está la capacidad del movimiento para elevar continuamente a jóvenes activistas y nuevas generaciones. También hemos visto cómo el símbolo de la ola verde en América Latina llega a África, Asia y Estados Unidos.
Las mujeres, las personas trans y no binarias de todas las razas y edades, etnias, niveles socioeconómicos, géneros, orientaciones sexuales, capacidades y estados migratorios tienen derecho a acceder a abortos seguros. Quienes sufren opresiones interseccionales enfrentan barreras adicionales de acceso, por lo que es crucial que nuestro movimiento tome la interseccionalidad como una herramienta de análisis, promoción y desarrollo de políticas para garantizar que el acceso al aborto esté disponible para todes.
Todas las opresiones impactan nuestra vida reproductiva. Luchamos contra un enemigo común y luchamos por objetivos compartidos: salud, derechos, justicia y libertades para todas las personas.. A menudo se pasa por alto a trabajadores sexuales, personas transgénero, personas no binarias, inmigrantes, refugiados, personas con discapacidad y jóvenes, entre otros. La información engañosa y el estigma que exacerba y alimenta las barreras deben ser expuestos y rechazados.
Hacemos un llamado a nuestras alianzas en el movimiento más amplio por la justicia social a que se nos unan por el derecho al acceso al aborto seguro. Como movimiento colectivo, tenemos el poder de promover la justicia reproductiva y la autonomía corporal y garantizar la libertad para todas las personas, especialmente las más vulnerables.
Hacemos un llamado a nuestros gobiernos a:
- ¡Despenalizar el aborto!
- Ampliar el acceso al aborto seguro eliminando todas las barreras políticas, ampliando los fundamentos legales, aumentando los límites de tiempo máximos y eliminando la aprobación de terceros.
- Garantizar la libertad y la justicia para todas las personas criminalizadas injustamente por acceder al aborto, proveer servicios y defender el derechos humano al aborto seguro.
- Establecer sistemas de atención para abortso accesibles e inclusivos para todes.
Hacemos un llamado a las instituciones globales y organismos de financiación a:
- Movilizar recursos para apoyar y proteger a todas las personas que brindan y apoyan el acceso al aborto seguro.
- Ofrecer financiamiento básico y flexible para que las organizaciones, los centros de atención de abortos, las colectivas de asistencia legal y acompañamiento puedan sostener su trabajo para ayudar a mantener los abortos seguros y accesibles.
Por último, hacemos un llamado a todas las personas y organizaciones que trabajan por el acceso universal a la atención médica, por la justicia reproductiva y una justicia social más amplia, y por los derechos humanos, a que se unan a nuestra lucha, organicen eventos y actividades, publiquen información sobre la situación en nuestros países y regiones y se sumen al llamado global este 28 de septiembre.